sábado, 31 de octubre de 2015

Resumen [Septiembre-Octubre (2015)]

LIBROS LEÍDOS [SEPTIEMBRE-OCTUBRE]
Septiembre:
1.La alargada sombra del amor.- Mathias Malzieu.
2.El mundo de los sueños reales.- Ana Newvillage, Cristina de la Iglesia
Alegre y JuanRax Lera San Miguel.

Octubre:
1.Temblor.- Maggie Stiefvater.

2. Magi- The Labyrinth of Magic #1
RESEÑAS PUBLICADAS
Prohibido- de Tabitha Suzuma.
El mundo de los sueños reales- de Ana Newvillage, Cristina de la Iglesia Alegre & JuanRax Lera San Miguel.
La alargada sombra del amor- de Mathias Malzieu.

Temblor- de Maggie Stiefvater.
IN MY MAIL BOX

IMM (2015) [Agosto-Septiembre (2015)]
NOTICIAS
¡Sueños de piedra sale a la venta!

FRAGMENTOS/FRASES
La mecánica del corazón (1/?)

BOOK TAGS Y OTROS

¡Mejores y peores lecturas del verano!

viernes, 30 de octubre de 2015

Temblor (Reseña)

Título: Temblor.
Título original: Shiver.
Autor/a: Maggie Stiefvater.
Género: Fantasía, Romance.
Editorial: SM
nº de páginas: 429
Encuadernación: tapa semidura con solapas.
Serie: Los lobos de Mercy Falls 1/3

Cuando el amor te hace temblar en otoño es mejor que el invierno no llegue nunca: Las primeras nevadas pueden arrebatarte a quien más deseas. Hace años, Grace estuvo a punto de morir devorada por una manada de lobos. Inexplicablemente, uno de ellos, un lobo de intensos ojos amarillos, la salvó. Desde entonces, todos los inviernos Grace se asoma al bosque y, desde la distancia, lobo y chica se observan. Cuando llega el calor, la manada desaparece y, con ella, <<su>> lobo.

Pero este año, Grace deseará que el invierno no llegue y que el otoño dure para siempre.

Ha conocido a un chico; se llama Sam. Es un tipo normal, salvo por sus ojos. Son de un extraño color amarillo.
Mi nombre es Grace y vivo en Mercy Falls. Actualmente soy una adolescente de 17 años, responsable y en ocasiones ausente cuando miro aquél bosque tan familiar que veo en las cercanías de mi casa. No sé por qué me siento así, quizá se debe a que de niña me atacaron unos lobos y fui mordida, pero uno de ellos me salvó de morir. Aquel lobo tenía los ojos amarillos. Lo cierto es que yo no recuerdo nada, solo pequeñas imágenes borrosas. Todo lo sé gracias a que me lo contaron y siempre hemos imaginado una forma en la que debió ocurrir. Lo único que sé con exactitud es que desde aquél día me cruzo con aquella mirada amarillenta a través de las ventanas de mi casa. Nos observamos en silencio, y siento que aunque seamos diferentes especies compartimos algo en común. Siempre lo he llamado <<Mi lobo>>, aquél lobo que solo veo en los meses más fríos del año y sin el cual las navidades no serían lo mismo.
Un día, salió la noticia de una persona a la que conocía, había sido atacada por los lobos y todos creían que había muerto. Como solución los habitantes decidieron dar caza a los lobos, para, a poder ser, exterminarlos o alejarlos para siempre del cercano bosque poblado de pinos.
Lo que yo no sabía es que uno de los lobos que fue disparado era el mío, lo encontré como humano, desnudo, herido y congelado en la entrada de mi casa. 
Se llamaba Sam, y era un adolescente común. Lo único que me decía que era mi lobo era el color de sus ojos.Su actitud salvaje, su olor a animal y a la madera húmeda del bosque.

Así fue como nos conocimos, aun cuando nos conocíamos desde hacía más de seis años.
Ambos sabíamos como eramos perfectamente, y os lo hemos querido demostrar.
Nuestra historia cobró un ritmo normal y hermoso, aunque en algunas ocasiones lo único que hacíamos era pasar el tiempo en una habitación al calor, nada importante ocurría durante esos momentos. Estábamos al calor porque nuestro mayor enemigo era el frío que cada día se iba aproximando más. Soñábamos que no se hiciera más grande y amenazara con separarnos.

Él frío lo convertía en humano.

Por eso durante todos estos años no lo había visto en otra estación que no fuera el invierno.

Pero esta vez no quería que se transformara, nunca más. Quería curarlo, pero, ¿cómo? no entendía como a pesar de ser mordida yo jamás sufrí transformación alguna. ¿Por qué él sí y yo no?
Mis dos mejores amigas no podían entenderme de la forma en la que yo quería. Sé que pensaban que estaba loca.
Estaba la mayor parte del tiempo sola, tenía unos padres despreocupados. Y mi única y verdadera compañía me la ofrecía él.
Sam... había sufrido tanto de pequeño. ¿Cómo es posible que le ocurriera aquello, aquello otro y...?
Nuestra historia era relatada por los dos, íbamos alternando. A veces él contaba como se sentía, otras veces yo. Poco a poco conseguimos escribir esta historia tan bonita, que esperábamos desde hacía años que se cumpliera. Es cierto que muchas veces las cosas no salían bien. Había problemas, dudas, miedo... no era perfecto, como no lo es nada.
Pero aprendí mucho de él, y quiero creer que él de mi.
Vivimos algo único. Nos arriesgamos porque esos sentimientos eran lo único que movían nuestro mundo.
Y al final... fue todo tan autoconclusivo. Pensaba que ahí iba a acabar todo. Pero no, aun puede continuar. Aun van a ocurrir más cosas.
Me gustaría saber que más nos puede ocurrir.

domingo, 18 de octubre de 2015

La mecánica del corazón (Frases 1/3)

-Tiene el corazón muy duro, creo que está congelado.
+Yo también tengo el corazón helado.


-No quiero que te falte ningún recuerdo
+No te preocupes por mí, tengo demasiados.


Pocas cosas han sucedido desde entonces, pero lo cierto es que vivo lleno de incertidumbre, cada día me hago más preguntas, y siento que necesito obtener algunas respuestas.
<<Love is dangerous for your tiny heart.>>


-Fue un día triste, un día en que no dejaba de llorar hasta que me di cuenta de que me reconfortaba beberme mis propias lágrimas.
+ Te pasas el tiempo curando a la gente, pero ahogas tus heridas en el alcohol de tus propias lágrimas.


El murmuro de las voces que se entremezclan me cautiva.
Se oye una música melancólica y algo maliciosa. Esa melodía me emociona, me produce sensaciones contradictorias, como cuando llueve y luce sol al mismo tiempo.
Baila como un pajarillo en equilibrio sobre tacones de aguja, andamios femeninos. Sus ojos son inmensos; uno puede perderse mientras escruta su interior.


No me importa ver borroso cuando canto y cuando beso, prefiero tener los ojos cerrados.
Oh, mi pequeño incendio, permítame mordisquear su ropa, desmenuzarla a buenas dentelladas, escupirlas como un confeti para besarla bajo una lluvia...
No veo más que fuego, con solo unos pasos puedo perderme a lo lejos, tan lejos en mi calle que no me atreva ya siquiera a mirar derecho a los ojos del cielo, no veo más que fuego.
Nos frotaremos el uno contra el otro hasta chamuscarnos el esqueleto, y cuando el reloj de mi corazón dé las doce en punto, arderemos, sin necesidad de abrir los ojos.


Me pregunto cómo unos ojos tan grandes y maravillosos pueden funcionar mal.
Intento mirarla a los ojos pero no puedo dejar de admirar su hermosa boca. No sospechaba que se pudiera pasar tanto tiempo observando una boca.
Me siento avergonzado. Al mismo tiempo rememoro las imágenes de la joven muchacha que canta sin gafas y mira el sol de frente. Y entonces ocurre: me enamoro. En el interior de mi reloj es el día más caluroso de la historia.
-Su rostro es hermoso, con esa sonrisa resplandeciente que provoca que uno quiera contemplarla mucho rato.

Algún día, es posible que tengas que pagar a un precio muy alto por todo el placer y la alegría que el amor provoca. Y cuanto más intensamente ames, más intenso será el dolor futuro.
Como mucho es posible que resista la intensidad del placer, pero no es lo bastante sólido para aguantar los pesares del amor.


¿Corro peligro de muerte? Tal vez, pero siento que mi vida peligra si no vuelvo a verla y, a mi edad, eso me parece aún más grave.

<<Love is dangerous for your tiny heart even in your dreams, so please dream softly.>>


Por frágil que sea mi reloj, la pequeña cantante se ha instalado cómodamente en él. Ha dejado sus pesadas maletas cargadas de yunques en cada rincón; sin embargo, jamás me había sentido tan ligero como desde que la conocí.

-¿Es tu corazón lo que hace tanto ruido?
+Sí.
-Estás enamorado de ella, ¿verdad?
Mi cerebro quiere decir <<No, no...>>, pero mi corazón, como siempre, tiene una relación más directa con mis labios.
+Sí, creo que estoy enamorado de ella.

Hace apenas unas horas, tenía a mi corazón por un navío capaz de romper las aguas de un océano enfurecido. Ya sabía que no era precisamente el más solido del mundo, pero creía en el poder de mi entusiasmo. Ardía en una alegría tan intensa ante la idea de reencontrar a la pequeña cantante que nada me habría podido detener.
Las penas amorosas pueden transformar a la gente en monstruos de tristeza.

jueves, 15 de octubre de 2015

Book tag: 'El juego literario de las frases'

Este Book tag consiste en escoger tus diez libros favoritos. El tag indica que en cada libro debes buscar una página y línea concreta y en esa frase escoger una única palabra con la cual una vez tengamos las diez palabras escogidas, formaremos un texto en las que aparezcan.
Normas: no se pueden usar nombres propios, escoger libros de la misma saga ni usar libros ilustrados o comics.
En este caso yo he decidido hacer el book tag con mi novio :) , él ha escogido cinco de los libros y yo los otros cinco. ¡Ahí va!
Sus elecciones:
Número 1: Página 10, línea 11.           Número 3: Página 38, línea 2.      Número 2: Página 23, línea 4.
INMÓVILES
CUERPO
REFLEJOS

Número 4: Página 24, línea 20.                                                              Número 5: Página 52, línea 15.
MISMOS
BLANCO











Mis elecciones:

Número 6: Página 66, línea 6.     Número 7: Página 77, línea 7.        Número 8: Página 86, línea 16.

SOMBRAS
EVITARÍA
MAÑANA

Número 9: Página 69, línea 9.                                                             Número 10: Página 100, línea 1.
SECARSE
   
SILUETAS
Las siluetas de aquellos hombres distantes cortaban el horizonte. Sus sombras no hacían más que aproximarse. Aquella noche no tan lejana había llovido, el suelo no había tenido tiempo para secarse y no había lugar donde resguardarse de las pequeñas gotas que de vez en cuanto volvían. Pensando en ello me sorprendí, estando tan asustada como sus cuerpos. Fríos e inmóviles. No entendía lo que estaba pasando, pero los reflejos de sus sombras me habían engañado. No eran hombres si no niños, niños hambrientos esperando el mañana, viviendo en ese solitario y oscuro callejón. Sus ropas estaban oscuras, aun cuando estás originalmente debían de haber sido de color blanco, incluso sus ojos carecían de blancura en semejante penumbra.
Entonces entre lágrimas pensé hasta que punto evitaría que esto siguiera pasando.
No me di cuenta hasta que ellos mismos me hablaron de que yo no era más que otra niña como ellos.